Aquellas personas con corazones artificiales podrían algún día experimentar algo similar a la ansiada energía inagotable. Un equipo de estudiantes de la Universidad Rice han desarrollado un dispositivo capaz de generar energía mientras caminamos y almacenarla en una batería que dará vida a un órgano artificial.
El prototipo que actualmente tienen en funcionamiento se coloca junto a la rodilla, para que con cada flexión un pequeño motor comience a girar y produzca la energía que irá directamente a la batería que se encargará de almacenarla. Un prototipo anterior realizaba la misma función a través de un pedal colocado estratégicamente en el talón de un zapato, un diseño que nos parece más acertado, ya que lucirá mucho mejor sin parecerse a una pieza ortopédica.
De todas formas el objetivo principal es conseguir que el dispositivo sea ligero y cómodo de llevar (especialmente que se pueda llevar durante largos periodos de tiempo), por lo que todavía habrá que pulir las versiones del producto antes de que se acerque a una versión final. Por ahora los logros alcanzados pasan por la batería encargada de almacenar la energía eléctrica generada, aunque el ideal es poder convertir esa energía en una fuente de alimentación para órganos, como podría ser el caso de un corazón artificial. Lamentablemente, a día de hoy no hay ningún órgano que esté funcionando con este método, pero sus creadores esperan que tarde o temprano consigan hacerlo.
By: es.engadget.com